La configuración latinoamericanista del discurso del Papa Francisco.
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Pérez-Millán, M. (2017). La configuración latinoamericanista del discurso
del Papa Francisco. Sphera Publica, 2, (17), 125-154.
Según el autor:
" Para comprender el pensamiento y discurso
bergogliano, se hace necesario no desestimar las fuentes humanas y religiosas de las que
bebió el Padre Jorge, influencias que luego reelaboró en su experiencia personal, espiritual,
pastoral y de liderazgo".
Tuvo influencias de:
- teología del pueblo, como modalidad menos dura de la teología de la liberación
- la doctrina justicialista en su relación con la doctrina social de la Iglesia
- y la espiritualidad ignaciana.
"El segundo círculo de análisis comprendió la organización axiológica del discurso.
El discurso presenta manifiestamente dos miradas o posicionamientos ideológicos
disímiles. Se dejan entrever, entonces, dos identidades enunciativas claramente opuestas:
la posición antagónica o ‘globalización excluyente’ y la posición evaluativa o ‘cultura del
encuentro".
En suma, el autor interpreta la realidad a partir del dualismo Pueblo vs.
Antipueblo.
El tercer círculo busca la configuración latinoamericanista del discurso de Francisco en
Bolivia.
Los
resultados obtenidos ratifican una afinidad indubitable entre la matriz del discurso de
Francisco y la matriz marco o modelo planteada por Arnoux. Con todo, el texto recupera
elementos del pensamiento crítico social latinoamericano, lo que queda demostrado con la
presencia de algunas regularidades.
"Inicialmente, el componente programático se actualiza en la proposición de tres grandes
tareas que requieren el aporte del conjunto de los movimientos populares: poner la
economía al servicio de los pueblos, unir los pueblos en el camino de la paz y la justicia y
defender la Madre Tierra".
.
"La pertenencia de Bergoglio a la cuarta vía de la teología de la liberación, su sincronía con
algunos rasgos ideológicos del peronismo y su naturaleza jesuítica se explicitan en su
pensamiento geopolítico".
La Cultura del Encuentro – exige diálogo, encuentro y entendimiento de los pueblos
latinoamericanos. Es la Cultura del Encuentro devenida en la Patria Grande. Asimismo, el
discurso exalta el espíritu de los pueblos originarios y la reafirmación de la identidad
latinoamericana.
Otro componente con presencia implícita o no ciertamente manifiesta es el relativo al
contraste con la situación europea. Se observa que el Romano Pontífice interpela a los
dirigentes para construir sobre las necesidades reales y experiencia viva de los pueblos
latinoamericanos; y desestima y pide desestimar modas intelectuales y poses ideológicas
que nada tienen que ver con la realidad de nuestras tierras.
Las influencias teológico-político-filosóficas que moldearon el pensamiento bergogliano por
algo más de 40 años confluyen en su original propuesta citada a lo largo del trabajo: Cultura
del Encuentro. Es esta la expresión más pulida respecto a la visión que tiene el Papa sobre
la política. Es un tipo de política que rechaza abiertamente la propuesta imperial del
ultraliberalismo individualista y el anacrónico socialismo totalitario.
Entonces se concluye que sus ideas desfilan por una tercera vía, por una tradición
latinoamericanista mucho más moderada: la de la opción preferencial por los pobres, la de
la justicia social, la del alivio contra la pobreza a través de acciones de base en las propias
comunidades, aceptando también un rol activo del Estado y la fijación de reglas al juego del
mercado.
Francisco retorna al humanismo integral o, acuñando una nueva tendencia, a un
humanismo cultural porque comprende al hombre –y a los pueblos- desde su peculiar
cultura y así como contribuyente de la totalidad heterogénea de la sociedad.
La tarea
asumida hoy por el Papa argentino reside en deconstruir y desandar, muy lentamente,
siglos de opresión cultural y acuñar nuevas valoraciones para determinaciones ideológicas
intra y extraeclesiales sostenidas a lo largo del tiempo.
En suma, el Papa del fin del mundo y de las periferias recupera fehacientemente elementos
del pensamiento latinoamericanista, elementos que, congregados, configuran una matriz
discursiva diferencial de la tradición eclesiástica de las últimas décadas –o siglos-, matriz
fecundada por una propuesta socio-político-cultural liberacionista, abiertamente opuesta la
red significante instaurada por el discurso dominante.
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