"Sobre el manido tema del alma"

Las cookies de este sitio se usan para personalizar el contenido y los anuncios, para ofrecer funciones de medios sociales y para analizar el tráfico. Además, compartimos información sobre el uso que haga del sitio web con nuestros partners de medios sociales, de publicidad y de análisis web. orcid.org/0000-0003-1152-1672

Domínguez Reyes, Juan Faustino
"Sobre el manido tema del alma", Ensayos de Filosofía, nº 10, 2019, semestre 2, artículo 6






Resumen

En el presente trabajo se parte de un periplo histórico sin ánimo totalizador, ya que tan solo tiene la intención de poner de relieve que el concepto del alma, de máxima importancia en otra época, ahora ha perdido interés, posiblemente, porque trasciende la propia existencia.


No es mi intención hacer un resumen histórico de las filosofías, ya que no tiene interés ninguno, ni aporta nada nuevo. Se trata de acudir a unos cuantos filósofos, que, desde mi punto de vista, son los más representativos sobre el tema que nos ocupa.

La teoría de Platón sobre la inmortalidad del alma (metempsicosis) queda, en parte, excluida por la teoría de Aristóteles (hilemorfismo). Pero ello no es óbice, como ha señalado Zambrano (2019: 55), para entender que ambos filósofos contribuyeron con todo el saber cristiano-medieval posterior.

A partir de aquí se aprecia el abandono del concepto del alma. Añadiríamos que, a diferencia de lo ocurrido en otras épocas, proliferan orientaciones de una pobreza conceptual relacionadas con el tema que nos ocupa.

 En pleno siglo XXI, el hombre no es considerado la unión de cuerpo y alma, sino de un linaje germinal (cfr. Bosi 2008: 454). Su muerte no tiene mayor importancia que la otorgada por sus familiares y amigos.

El ser humano no es más que un robot. Su conciencia es un reflejo mecánico de transmisión de mensajes con información cuantificada, y, visto así, nunca muere. Estamos, por el contrario, ante una supervivencia vigilada y provocada, una máquina humana individual a imagen y semejanza de su creador para que haga lo que él no puede, pero sí lo desea hacer.



Comentarios

Entradas populares de este blog

Clasificación de valores en Ortega y Gasset

diferencia entre Sinodo y Concilio

Diferencias y semejanzas entre el Bautismo de Juan Bautista y Jesús