Y el sentido se hizo carne

Domingo García,

«Y el Sentido se hizo carne». Una aproximación teológica a la cuestión del sentido de la vida, en  Facies Domini (2009) 193-215



"Debemos a Viktor Frankl la creación de la llamada «logoterapia».


El psicólogo austriaco, discípulo de Sigmund Freud, experimentó en primera persona el descenso a los infiernos de la condición humana: en medio del absurdo nazi, Frankl comprendió que sólo la «voluntad de sentido», el deseo de encontrar un sentido a la existencia, ponía a salvo la dignidad y la esperanza humana en el campo de concentración. 


A la «voluntad de poder» nietzscheana, leída por Hitler como dominación del fuerte sobre el débil, Frankl contraponía la «voluntad de sentido», como salvavidas en el absurdo del Lager 1


Sobreviviendo al horror nazi, Frankl pudo ofrecer después su logoterapia como ayuda a los náufragos del absurdo existencial.


La respuesta del psiquiatra austriaco ha quedado vinculada para siempre

a la pregunta por el sentido. 


La pregunta es antigua como el mismo ser humano 2, aunque en la edad moderna la cuestión ha aparecido de modo problemático, como cuestionamiento radical de la existencia3: el hombre ha

pasado de ser tema (algo perfectamente definido) a ser problema 4.


Libros de Frankl:

V. E. FRANKL, El hombre en busca de sentido, Barcelona 2004; IDEM, En el principio era el sentido: reflexiones en torno al ser humano, Barcelona 2005; 

IDEM, El hombre en busca del sentido último: el análisis existencial y la conciencia espiritual del ser humano, Barcelona 1999;

IDEM, La presencia ignorada de Dios. Psicoterapia y religión, Barcelona 2006; 

IDEM, La voluntad de sentido. Conferencias escogidas sobre logoterapia, Barcelona 1994; 

IDEM, Psicoterapia y humanismo. ¿Tiene un sentido la vida?, Madrid 1983;

 IDEM – P. LAPIDE, Búsqueda de Dios y sentido de la vida. Diálogo entre un teólogo y un psicólogo, Barcelona 2005.


Frankl había elaborado algunos elementos de su teoría antes de su internamiento en el campo de concentración, concretamente en 1921. Cf. J. B. TORELLÓ, «Sobre el sentido último de la vida en la Fides et Ratio, 35-46», en: M. LLUCH– J. DE ARANGUREN–J. J. BOROBIA (ed.), Fe yxrazón. Simposio Internacional Fe Cristiana y Cultura Contemporánea, EUNSA, Pamplona 1999, 35-46, aquí 39.

Cf. H. RATSCHOW, en: J. GARCÍA ROJO, El sentido de la vida, 238.

«En ninguna otra época de la historia se ha vuelto el hombre tan problemático a sí mismo como en la actualidad» M. SCHELER, El puesto del hombre en el cosmos, Betiles, Buenos Aires 1979, 12.

Distinción de J. D. García Bacca, citado en M. MOREY, El hombre como argumento, Anthropos, Barcelona 1987, 11.

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