Desarrollo sostenible
CONCEPTO DE DESARROLLO SOSTENIBLE
En el siglo XXI el hombre ha alcanzado un nivel de vida, debido a la revolución tecnológica, a los avances científicos, a los movimientos filosóficos que han cambiado las concepciones sobre la dignidad y la valoración del hombre. Hoy se ha aumentado la esperanza de vida, se ha erradicado enfermedades, se ha mejorado las comunicaciones, las nuevas tecnología avanzan a un ritmo frenético; pero a la vez, el hombre está encontrando graves problemas a los que debe encontrar soluciones porque afectan a la humanidad, a su propia supervivencia, como son la contaminación y degradación de los ecosistemas, el cambio climático, la pérdida de diversidad biológica y cultural, el agotamiento de recursos, los nuevos problemas éticos, la nueva concepción de la mujer, la vulneración de los derechos humanos...
En el mes de diciembre de 2004 la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la resolución 57/254 relativa al Decenio de las Naciones Unidas para la Educación con miras al Desarrollo Sostenible (2005-2014). Esta educación pretende hacer reflexionar sobre nuestro modo de vida, con el fin de conseguir tener un mundo mejor. Un mundo mejor que nos permita seguir avanzando en la calidad de vida hoy alcanzada pero sin esquilmar los recursos como si fuesen propiedad de la generación actual.
Cuando hablamos de desarrollo sostenible aludimos "al desarrollo que satisface las necesidades de la generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades" Esta definición fue propuesta por la Comisión Mundial del Medio Ambiente y del Desarrollo en el año 1998, definición que ha recibido muchas críticas, porque parece que el término sostenible ha estado presente en muchas culturas. Y es cierto que si hablamos sólo de sostenibilidad es algo que lo encontramos en todos los tiempos y en todas las culturas. Pero la idea totalmente nueva es que los recursos no son ilimitados y que el actual desarrollo puede acabar con los recursos disponibles. Siempre se utilizaban creyendo que durarían eternamente, y hoy, comprendemos el error de su duración eterna y que con nuestra mala utilización podemos exterminarlos. Cuando surgió esta idea, eran sólo unos pocos "locos" los defensores de este concepto de sostenibilidad. Actualmente es una idea presente en nuestro acervo cultural y cada vez se defiende con más ímpetu y por más personas.
Esta idea empieza a calar en la mentalidad actual y nos hace salir de esa indiferencia anterior y preocuparnos por conservar nuestros recursos, es decir, que hagamos avanzar juntos al desarrollo y al medio ambiente. Se habla de un paradigma de economía ecológica.
El desarrollo debe seguir avanzando, no se puede parar porque es necesario dar respuesta a la generación actual de los graves problemas sin soluciones, como son la pobreza, la desigualdad de sexos, la falta de necesidades básicas de la mayoría de la población actual, la emigración... Es necesario avanzar en tecnología, en ciencia, en igualdad social, en fomentar un desarrollo para mejorar la calidad de vida de todos los seres humanos. El desarrollo no puede parar, es una creencia imparable, pero siempre guardando el equilibrio para no romper la continuidad de la especie y del mundo en general.
El nacimiento de este concepto, de educar en la naturaleza y para la naturaleza, habría que situarlo a finales de la década de lo sesenta y principios de los setenta, motivado por la degradación del medio ambiente, pero siempre conservando el tinte conservador de la educación, aunque las salidas al campo, los itinerarios en la naturaleza, los huertos escolares, las colonias de verano tenían unos objetivos de educación ambiental.
Posteriormente se cambia este sentido pedagógico y no basta con enseñar desde la naturaleza, sino educar para el medio ambiente, es decir, no basta con conocerlo, sino que es necesario adoptar conductas correctoras con el medio ambiente para mejorarlo o conservarlo.
Es en los primeros años de los noventa cuando la Educación se relaciona con el Desarrollo Sostenible concretándose "en dar al alumno experiencias de aprendizaje que le permitan comprender las relaciones de los seres humanos con el medio, la dinámica y las consecuencias de esta interacción, promoviendo la participación activa y solidaria en la búsqueda de soluciones a los problemas planteados (Gonzalez Muñoz)
Esto implica cambios en lo componentes curriculares para dar respuesta a las nuevas necesidades detectadas.
En el siglo XXI el hombre ha alcanzado un nivel de vida, debido a la revolución tecnológica, a los avances científicos, a los movimientos filosóficos que han cambiado las concepciones sobre la dignidad y la valoración del hombre. Hoy se ha aumentado la esperanza de vida, se ha erradicado enfermedades, se ha mejorado las comunicaciones, las nuevas tecnología avanzan a un ritmo frenético; pero a la vez, el hombre está encontrando graves problemas a los que debe encontrar soluciones porque afectan a la humanidad, a su propia supervivencia, como son la contaminación y degradación de los ecosistemas, el cambio climático, la pérdida de diversidad biológica y cultural, el agotamiento de recursos, los nuevos problemas éticos, la nueva concepción de la mujer, la vulneración de los derechos humanos...
En el mes de diciembre de 2004 la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la resolución 57/254 relativa al Decenio de las Naciones Unidas para la Educación con miras al Desarrollo Sostenible (2005-2014). Esta educación pretende hacer reflexionar sobre nuestro modo de vida, con el fin de conseguir tener un mundo mejor. Un mundo mejor que nos permita seguir avanzando en la calidad de vida hoy alcanzada pero sin esquilmar los recursos como si fuesen propiedad de la generación actual.
Cuando hablamos de desarrollo sostenible aludimos "al desarrollo que satisface las necesidades de la generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades" Esta definición fue propuesta por la Comisión Mundial del Medio Ambiente y del Desarrollo en el año 1998, definición que ha recibido muchas críticas, porque parece que el término sostenible ha estado presente en muchas culturas. Y es cierto que si hablamos sólo de sostenibilidad es algo que lo encontramos en todos los tiempos y en todas las culturas. Pero la idea totalmente nueva es que los recursos no son ilimitados y que el actual desarrollo puede acabar con los recursos disponibles. Siempre se utilizaban creyendo que durarían eternamente, y hoy, comprendemos el error de su duración eterna y que con nuestra mala utilización podemos exterminarlos. Cuando surgió esta idea, eran sólo unos pocos "locos" los defensores de este concepto de sostenibilidad. Actualmente es una idea presente en nuestro acervo cultural y cada vez se defiende con más ímpetu y por más personas.
Esta idea empieza a calar en la mentalidad actual y nos hace salir de esa indiferencia anterior y preocuparnos por conservar nuestros recursos, es decir, que hagamos avanzar juntos al desarrollo y al medio ambiente. Se habla de un paradigma de economía ecológica.
El desarrollo debe seguir avanzando, no se puede parar porque es necesario dar respuesta a la generación actual de los graves problemas sin soluciones, como son la pobreza, la desigualdad de sexos, la falta de necesidades básicas de la mayoría de la población actual, la emigración... Es necesario avanzar en tecnología, en ciencia, en igualdad social, en fomentar un desarrollo para mejorar la calidad de vida de todos los seres humanos. El desarrollo no puede parar, es una creencia imparable, pero siempre guardando el equilibrio para no romper la continuidad de la especie y del mundo en general.
El nacimiento de este concepto, de educar en la naturaleza y para la naturaleza, habría que situarlo a finales de la década de lo sesenta y principios de los setenta, motivado por la degradación del medio ambiente, pero siempre conservando el tinte conservador de la educación, aunque las salidas al campo, los itinerarios en la naturaleza, los huertos escolares, las colonias de verano tenían unos objetivos de educación ambiental.
Posteriormente se cambia este sentido pedagógico y no basta con enseñar desde la naturaleza, sino educar para el medio ambiente, es decir, no basta con conocerlo, sino que es necesario adoptar conductas correctoras con el medio ambiente para mejorarlo o conservarlo.
Es en los primeros años de los noventa cuando la Educación se relaciona con el Desarrollo Sostenible concretándose "en dar al alumno experiencias de aprendizaje que le permitan comprender las relaciones de los seres humanos con el medio, la dinámica y las consecuencias de esta interacción, promoviendo la participación activa y solidaria en la búsqueda de soluciones a los problemas planteados (Gonzalez Muñoz)
Esto implica cambios en lo componentes curriculares para dar respuesta a las nuevas necesidades detectadas.
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