Cristianismo y Europa
Cristianismo y Europa
En una Europa marcada por la secularización y el olvido de las raíces cristianas, la tarea del Consejo de Conferencias Episcopales es anunciar la buena noticia del Evangelio
Hace cincuenta años se creó el Consejo de las Conferencias Episcopales de Europa. Este organismo fue creado en el contexto de la construcción europea para fomentar el conocimiento mutuo y permitir que los episcopados europeos cooperaran ante los retos que fueran presentándose a lo largo de ese proceso.
En una Europa marcada por la secularización y el olvido de las raíces cristianas, la principal tarea del Consejo de Conferencias Episcopales es anunciar la buena noticia del Evangelio y todas sus implicaciones sociales y culturales, sosteniendo a las comunidades cristianas y siendo una voz de referencia para muchos que están en búsqueda.
Desafíos enormes como la crisis económica y demográfica, al auge de los populismos, y la fragilidad de las libertades religiosa y de educación, afectan a la concepción del ser humano y de las relaciones de convivencia. La presencia de este organismo ha sido discreta, pero significativa, especialmente desde la caída del Muro de Berlín, que permitió incorporar plenamente a la Iglesias del este de Europa.
A través de las dificultades del momento, la Iglesia católica, con la guía clarividente de los últimos papas, nunca ha querido dejar de acompañar la aventura europea, ofreciendo una palabra y una presencia que para algunos resulta incómoda, pero que sigue siendo decisiva para el futuro del continente.
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