Un mensaje cristiano se oculta detrás de la que podría ser la imagen más célebre de los Juegos Olímpicos de 2024.



La foto más icónica de los Juegos Olímpicos tiene un mensaje cristiano
El dedo índice levantado del surfista que parece estar flotando en el aire pone en alto el testimonio público de los atletas evangélicos brasileños.

FRANCO IACOMINI|12/AGOSTO/2024 

Image: Jerome Brouillet / Colaborador / Getty
El brasileño Gabriel Medina reacciona tras conseguir una gran ola en surf masculino durante los Juegos Olímpicos de París 2024.


Un mensaje cristiano se oculta detrás de la que podría ser la imagen más célebre de los Juegos Olímpicos de 2024.

El 29 de julio, en la tercera ronda de las competencias de surf de tabla corta, el brasileño Gabriel Medina se enfrentó al japonés Kanoa Igarashi, quien eliminó a Medina en las últimas Olimpiadas. En su segunda ola, Medina salió exultante de un tubo, con los dedos de ambas manos en alto, sugiriendo que los jueces debían ofrecerle un diez por su actuación. (Dos de los cinco jueces estuvieron de acuerdo; su puntuación finalpromedió 9.9).

Medina giró entonces hacia la izquierda, hacia el oleaje, y saltó de su tabla, levantando la mano derecha y señalando con el dedo índice hacia arriba. Esta fue la imagen que captó el fotógrafo de Agence France-Presse Jérôme Brouillet.

Los evangélicos brasileños reconocieron inmediatamente la señal.

«Es como si dijera: “No es a mí a quien deben mirar, es a Dios. Este momento de gloria no es mío, sino suyo”», afirmó João Guilherme Züge, historiador de la religión residente en el Museu Paranaense de Curitiba.


A diferencia de Estados Unidos, donde los jugadores de béisbol suelen señalar al cielo después de batear un jonrón por diferentes motivos —algunos para expresar gratitud a Dios, otros para honrar a sus seres queridos fallecidos—, el gesto de los atletas brasileños se ha asociado estrechamente con los jugadores cristianos.

El dedo levantado, señalando al cielo, ha sido la marca registrada de los atletas evangélicos brasileños durante más de 40 años, una de las numerosas muestras públicas de fe tras la gloria competitiva que ha ayudado a afirmar y establecer la identidad evangélica, especialmente cuando el movimiento cristiano evangélico estaba apenas en sus inicios.

Nadie parece recordar quién usó inicialmente el gesto, pero ganó popularidad en la década de 1990, principalmente a través de jugadores de fútbol, como Kaká, que levantaban el dedo índice después de sus proezas en el campo, sabiendo que la cámara los enfocaría después de marcar un gol.

A pesar de su omnipresencia, la intención espiritual del mensaje no ha trascendido necesariamente de los círculos evangélicos

Comentarios

Entradas populares de este blog

Clasificación de valores en Ortega y Gasset

diferencia entre Sinodo y Concilio

¿Qué es hierognosis?